sábado, 22 de septiembre de 2012

¡PREMIO PARA CALMECA!


TERCER CONCURSO NACIONAL DE FIBRAS VEGETALES


El pasado mes de septiembre de 2011 se celebró en la Ciudad de México el Tercer Concurso Nacional de Fibras Vegetales, convocado por el Fondo Nacional para el Fomento a las Artesanías.
Este concurso reúne a los artesanos de todo México donde cada uno muestra su gran talento en la fabricación de artesanías elaboradas con palma, raíces, tallos, etc.
Es un orgullo mencionar que en este concurso el amigo y vecino Valentín Tapia Arenas de nuestro pueblo de San Juan Calmeca, obtuvo un tercer lugar con la elaboración de un mantel de centro de mesa fabricado en palma.
Este logro es una muestra de que en nuestro pueblo se elaboran artesanías de alta calidad al grado de ser galardonadas en un concurso nacional.
Felicidades al joven Valentín Tapia que ha obtenido este reconocimiento como uno de los mejores en todo México.
Debemos sentirnos orgullosos y aplaudir a todas las personas de Calmeca que fabrican artesanías en palma (petates, tanates, aventadores, juguetes, etc.), reconocer su trabajo y apoyarlos comprando o llevando sus artesanías a otros lugares, llevando en alto el nombre de Calmeca. Mayor información en www.fonart.gob.mx.

Este artesano además de fabricar piezas con palma tambien fabrica artesanías con cera, totomoxtle (hoja de maíz), ha fabricado arcos con semillas conmemorativos para la Iglesia de Calmeca y Tlapanalá, domina la técnica del telar de cintura a la usanza prehispánica, entre otras. Tambien ha impartido cursos de palma y telar en diferentes comunidades del Estado de Puebla y Morelos, incluido un curso de palma en la comunidad de Calmeca en el 2009.



Exposición de artesanías durante el evento.





domingo, 9 de septiembre de 2012

Los Malacates


Preguntó el niño a su papá:
¿Que son estas rueditas de piedra que estaban en la cocina?
El papá contestó: ..son trompitos que jugabamos cuando eramos niños. Se jugaban así, mira le pones un palito y le das vuelta para que gire...

El papá ignora que lo que tiene en sus manos es un malacate, pieza elaborada en barro y cocido al fuego que alguna vez fué utilizado para hilar (hacer hilo). 
¿Quien fabricó estos malacates y por qué se encuentran enterrados en Calmeca?
Los malacates fueron utilizados por los antiguos pobladores de Calmeca, gente que vivió aqui hace mas de 500 años. Calmeca fué un sitio donde estuvo asentada una población pequeña, conformada por pocas familias dispersas en los cerros. Algunos restos de lo que fueron vivendas de hace mucho tiempo se pueden observar en la actualidad en los alrededores de Calmeca. Por ejemplo en un cerrito cerca de la carretera existe una base de piedra de una vivienda, otro sitio donde existe evidencia de un asentamiento humano se encuentra en el camino que conduce a la barranca de la angostura.

Los malacates fabricados con barro son una herramienta que se utiliza en la actualidad en diferentes grupos étnicos de los Estados de Oaxaca, Chiapas, Puebla, Morelos, Chihuahua y otros. Estos grupos manufacturan su propia ropa mediante el método de telar de cintura como se hacía hace cientos de años.

En Calmeca como en la región, los malacates eran utilizados cotidianamente para la fabricación de hilo y su posterior uso diverso en ropa, hilos, cestos y cuerdas. El trabajo de los tejidos estaba a cargo de las mujeres, las madres de familia enseñaban a sus hijas el método desde cosechar los materiales como el algodón, su preparación, su teñido y su tejido. Se sabe por la información presente en algunos códices que algunas regiones de la Cuenca del Balsas, donde se ubica Calmeca, pagaban tributo a Tenochtitlán con mantas, plumas y copal.

En Calmeca, como en la región de Izucar de Matamoros, se cultivaba o se colectaba el algodón para la fabricación de hilo, pero es muy posible que tambien se fabricaran hilos con "ixtle" del maguey, especie aparentemente más abundante en los alrededores de Calmeca. En la actualidad nadie recuerda el telar de cintura para la fabricación de ropa, sin embargo la fabricación de prendas con esta técnica es muy valorada en el sentido cultural y económico. En los estados de Oaxaca y Chiapas por ejemplo muchas familias obtienen importantes recursos económicos por la fabricación y venta de blusas y vestidos fabricados a la usanza antigua. Las piezas elaboradas con estas técnicas no solo son magnificas por sus colores que le dan los tintes naturales, sino porque encierran en ella un conjunto de conocimientos que son heredados de las generaciones de mexicanos que vivieron en estas tierras. La obtención del algodón, su limpieza, el hilado, el tinte, el montaje sobre el telar, el metodo de tejido, las herramientas para el tejido, su bordado y su uso.

De ahi la existencia de malacates de diferentes formas y tamaños en muchos sitios de Calmeca. Por lo general, las personas que tienen en su poder alguna pieza de este tipo, incluidos ídolos, puntas de flecha o piezas de barro siempre piensan en venderlas y obtener un dinero. En la actualidad este es un grave problema que enfrentan los monumentos arqueológicos del país. En lugar de desenterrar la historia para maravillarnos y comprendernos como mexicanos, cada vez que alguien vende las piezas nos hunde en la completa ignorancia porque no sabemos lo que tenemos en nuestras manos y lo peor es que no nos importa. Cada vez que alguien encuentra una pieza debería sentirse orgulloso y afortunado porque tiene en sus manos una herencia de mas de 1000 años y que nunca en su vida podrá volver a ver. Por su puesto que siempre habrá gente que esté dispuesta a pagar dinero por esa pieza. La pregunta es ¿cuanto vale una pieza? ¿cuanto vale ese conocimiento alrededor de ella? ¿Cuanto vale una herencia de alguien que piso el mismo suelo y que seguramente es hasta un pariente nuestro?

Cabe mencionar aquí que existe una LEY FEDERAL SOBRE MONUMENTOS Y ZONAS ARQUEOLÓGICOS, ARTÍSTICOS E HISTÓRICOS que castiga con carcel el tráfico de piezas, el uso indebido de monumentos y el saqueo de piezas, ya que son bienes de la Nación.

Esta situación plantea la necesidad de hacer una reflexión sobre lo que tenemos en Calmeca y lo que necesitamos. Lo que tenemos es una gran acervo cultural por la gran cantidad de piezas arqueológicas, lo que necesitamos es que alguien nos ilustre y nos de una aproximación para saber más de nuestra cultura, para ello nos pueden ayudar arqueólogos, historiadores e investigadores y finalmente necesitamos un espacio físico para colocar todo esta evidencia, que en la actualidad no tenemos, no solo para nosotros, sino para las generaciones que vendrán. 

"Los pueblos que no conocen su historia, estan condenados a repetirla"

Biól. F.Guerra


Telar de cintura de Hueyapan Morelos, se muestra el uso del malacate.